Después de casi 30 años, vuelve al Teatro de la Maestranza la esperada ópera Carmen de G. Bizet. Una historia de instinto, amor y muerte que esconde el eterno combate entre la Libertad y el Poder.

El mito de Carmen, representa la libertad por antonomasia. “¡Carmen nunca se rendirá! Nació libre, y libre morirá”, clama la protagonista. Como miembro de un grupo social marginal no se siente vinculada a norma alguna, le resulta indiferente el orden establecido y actúa continuamente guiada por sus pulsiones, a su libre albedrío. No es un personaje rebelde, porque ello implicaría una lucha contra un orden social que le resulta ajeno y tampoco es el personaje inmoral, pues no conoce moral susceptible de ser trasgredida.

La producción de Calixto Bieito ubica la acción en la España de los años 70, con pocos pero poderosos elementos escénicos. El nombre del director de escena burgalés, ha quedado asociado indisolublemente al montaje icónico del que existen cuatro reproducciones escenográficas replicadas dado su extenso recorrido en escenarios de medio mundo y que tras su estreno en el Festival de Peralada en 1999, se ha podido disfrutar con rotundo éxito de crítica y público en más de 30 teatros de ópera del mundo.

Al frente de la ROSS Anu Tali, estrella ascendente de la dirección orquestal y doble reparto encabezado por Ketevan Kemoklidze y Sandra Ferrández, Sébastien Guèze y Antonio Corianò, María José Moreno y Raquel Lojendio, o Simón Orfila y Jean-Kristof Bouton, entre otros.

Libreto de Henri Meilhac y Ludovic Halévy. Estreno  en la Opéra-Comique de París, el 3 de marzo de 1875.

Real Orquesta Sinfónica de Sevilla 
Coro de la A.A. del Teatro de la Maestranza 
Director, Íñigo Sampil

Escolanía de Los Palacios 

Producción, Gran Teatre del Liceu en coproducción con la Fondazione Teatro Regio de Turín, Fondazione Teatro Massimo de Palermo y La Fenice de Venecia.